"Las mejores escenas porno son esas en las que se cogen al más lindo"
Lic. Sony de Barriera
Recurrimos a la sapiencia del más marica de los tres (según su propia definición) para introducir este tema tan urticante y de álgida actualidad: "La influencia del ají picante en las relaciones carnales con la Iglesia Católica" jajajajajajajaja.
Hablando en serio, ya comenzó octubre y todos nosotros tenemos la sensación de que el año se nos está yendo demasiado rápido. ¿A ustedes les pasa igual?
Según Sony y sus ideas fijas, eso nos pasa porque estamos cogiendo mucho. "¡Que es como debe ser!", aclara.
Con la esperanza de que ustedes estén en la misma situación, les dejamos entonces a continuación unos consejitos para sacarle un mayor provecho al chongo que les toque. Su autor (a saber, Sony de Barriera, diplomado en la Universidad de las Calles de Buenos Aires) les ha dado el título de "Consejos para maricas felices"... pero ya sabemos cómo es Sony de autorreferencial...
1) De entrada tenés que dejar bien claro qué es lo que esperás del otro. Las cosas importantes hay que hablarlas a calzón quitado. Es muy frustrante eso de esforzarse pacientemente por dilatar el culo y que, en el momento más apasionado, el chongo te dé la espalda.
2) En todo momento tenés que ser vos mismo y actuar con toda naturalidad y relajación. Las plumas nunca se ocultan del todo y, por más que te esfuerces en hacerte el macho, siempre asoman por cuello de la camisa leñadora.
3) Es importante tener confianza en uno mismo y transmitir seguridad. A ningún chongo le gusta que la marica salga corriendo despavorida cuando le muestra su paquete de 25cm.
4) Hay que acomodarse a las circunstancias y manejarse con cuidado. Si el chongo no da una señal inequívoca en contrario, no es conveniente arrancarle los calzones con los dientes después del primer chupón.
5) Cuando tengas su pija delante de tus ojos, ¡prestá mucha pero mucha atención! Si percibís movimientos extraños entre la maleza de vello púbico es porque ustedes no están solos en la habitación. Las ladillas suelen ser bichitos silenciosos pero implacables. En ese caso, retirate urgentemente y date un baño con vinagre por si acaso.
6) Cuando ya tengas la verga en la boca, es imprescindible recordar que no es un chicle. NO LA MUERDAS NI LA MASTIQUES. A menos que él te lo pida, por supuesto.
7) Analizar el lenguaje no verbal del chongo es fundamental. Si mientras se la estás mamando, emite sonidos tales como jadeos, gemidos o bien presiona tu cabeza para que te la tragues más profundo, se supone que va todo bien. Ahora, si el chongo emite improperios o interjecciones del tipo "ay", "uy" o "laputamadrequeteparió" es porque hay algo que estás haciendo mal.
8) El cerebro de la marica nunca debe descansar. Para eso está el chongo, que supone que el sexo es solo un mete y saca hasta acabar. La marica debe estar siempre alerta y sacar provecho de todas las reacciones del chongo. Porque todas las maricas debemos tener claro que el sexo se disfruta con conciencia de que lo estamos disfrutando. Y para ayudar a ello, entretanto nos concentramos en la faena, bueno es que vayamos pensando en el futuro inmediato, salivándonos los dedos y darle un poquito de cariño a nuestro esfínter para que se vaya preparando. Se supone que cuando el dedo mayor puede entrar hasta más allá de la segunda falange, ya estás preparado para pasar al siguiente nivel.
9) Cuando se la estés mamando, no te quedes solo en la pija. Por supuesto que el bate de bèisbol que el chongo porta entre las piernas es importante, pero no lo son menos las zonas vecinas. Llevá a pasear tu lengua también por los huevos, por las ingles y (¡por qué no!) por el culo. Pero el culo con mesura, por favor. Una porque todavía hay muchos chongos que lo consideran una zona tabú. Y otra porque, si le agarra el gustito, corrés el riesgo de quedarte con las ganas de sentarte en su pedernal.
10) La profundidad de la mamada es algo importante. Pero como casi todas las cosas importantes en la vida, se puede simular. Si el chongo tiene una verga demasiado larga para tu experiencia o para tu cavidad bucal, lo mejor es ayudarse con la mano mientras le chupás la punta. Esto te va a servir como tope, cuando el chongazo intente metértela hasta el fondo (situación en la que quizá te ahogues) y también será útil para que él tenga la sensación de que te la estás tragando hasta los pelos. Haceme caso: combinar paja y mamada es lo mejor.
11) Bueno, marica querida, ya la chupaste bastante y es hora de ir a los bifes. La pija ya está bien salivada y tu culo ya se ha dilatado, así que... ¡a que te la ponga! Si la tiene muy grande o si sos principiante, lo mejor es que te sientes sobre su herramienta para la primera penetración. Pero en realidad, todo lo que pueda decirse al respecto es inútil si no prestamos atención al GRAN SECRETO DE LA PENETRACIÓN ANAL: la lubricación. Seguramente habrás visto en más de una porno que con un simple escupitajo o unas gotitas de gel son suficientes. Pues... ¡NOOOOOOOO! ESO ES MENTIRA. la cantidad de lubricante nunca es demasiada. Inundate el culo con gel lubricante y vas a ver que todo fluye.
Dicho lo cual, acabamos... juas.
Increible !!! Me quito el sombrero ante las brillantes disertaciones del maestro Sony, sobre el arte del folleteo. Una exposición soberbia jejeje.
ResponderBorrarBESITOSSS !!!
Gracias Juanjo. Algo hay que hacer con la experiencia no? jajajajaja
ResponderBorrarLo que ninguno de mis esposos dijo es que estas son palabras posta de sony una noche que estabamos en casa cogiendo con el nuebo amiguito de sebastian.
ResponderBorrarzek es muy groso con esa memoria qu tiene
Muy bueno, habrá que tomar apuntes. No tienen desperdicio.
ResponderBorrarSois geniales
Un abrazo.