El 1 de diciembre siempre ha sido una fecha muy particular en este blog y nunca ha faltado la publicación alusiva al Día Mundial del VIH/SIDA. Y aunque este año estamos los tres muy atareados con nuestros proyectos personales, no quería discontinuar nuestra tradición de tantos años. Esta vez solo diré: Pasen y lean.
Lo habitual es llamarlo "Día Mundial de LUCHA contra el Sida". Sin embargo, el año pasado me encontré con un viejo conocido de la noche, devenido en activista a favor de los derechos de las personas que viven con el vih, y me planteó un punto de vista muy atendible a la hora de pensar en la temática.
La idea de "lucha", según su punto de vista, resulta un tanto bélica, milica, veligerante. En la actualidad, hablar de sida también implica a las personas que viven con el virus. De manera que luchar contra el virus sería también luchar contra las personas que lo llevan en su sangre (imagen aparentemente poética, pero no). Durante años se ha naturalizado la idea de combate y de destrucción, aniquilamiento y desintegración del vih. Pero ¿cómo podríamos hacer semejante cosa sin combatir, destruir, aniquilar o desintegrar a las personas infectadas? El virus está instalado en ellas y forma parte de sus vidas. Porque ya en el siglo XXI podemos hablar de sida y de vida en la misma frase sin ponerlas en oposición.
Basándose en planteos de este tipo, algunas organizaciones optaron por llamarlo "Día Mundial de ACCIONES contra el VIH/SIDA", lo cual suena mucho menos violento y militarista. No obstante, se trata también de un título difícil de imponer a estas alturas. Además de ser además un nombre con poco gancho.
Incapaz de asumir una postura concreta al respecto, he optado en el día de hoy por llamar a la efeméride simplemente "Día Internacional del VIH/SIDA", con todas las contras que podremos encontrarle también a esta denominación con dejo de celebración.
Más allá de los nombres, lo cierto es que el Ministerio de Salud de la República Argentina ha dado a conocer recientemente cifras bastante desalentadoras respecto del avance de la epidemia, sobre todo sobre las franjas más jóvenes de la población.
En la Argentina hay 126 mil personas que viven con VIH. De ese total, el 30% (unas 36.000 personas) desconoce su diagnóstico. La principal vía de contagio, sin importar el género, es la sexual. Cuando se comparan los casos en los períodos 2004-2005 y 2013-2014, el dato destacado es el aumento de personas con el virus en la franja etaria de 15 a 24 años, observándose en los de entre 15 y 19 que el crecimiento es mayor en las mujeres, la única franja de todo el espectro en la que superan a los hombres.
Para entender ese y otros problemas, el equipo de Dirección de Sida y ETS de la cartera sanitaria realizó un estudio basado en cuestionarios cualitativos a una población de 18 a 55 años sexualmente activa en los que buscaron evaluar los saberes, significados y prácticas asociadas al VIH-Sida. Una de esas áreas fue el cuidado preventivo: en cuanto a los motivos o miedos que llevan a hacerlo, la preocupación central fue el embarazo, seguida de las enfermedades de transmisión sexual, VIH-Sida incluido. Y entre las maneras, se destacaron los anticonceptivos y el preservativo, pero también la conversación y la confianza en el otro.
En el caso de los más jóvenes, el estudio concluyó que el preservativo se percibe como algo ocasional, para relaciones que no son serias ni estables. Según ellos, aunque la información sobre su importancia exista y la tengan presentes, su uso implica arruinar el momento de la relación sexual. Y sobre todo en mujeres, pero también entre hombres, surgió la "vergüenza" a la hora de comprarlos o buscarlos en hospitales, por sentir que eso hace que los miren de manera diferente.
"Estos hechos, sumados a una sexualidad muy activa y de inicio más temprano, el uso de alcohol y drogas que inhiben el control, la idea de que. a mí no me va a pasar. y el hecho de que se trata de una generación que no vivió la etapa oscura del VIH-Sida en los inicios de la epidemia, donde la gente moría y las drogas disponibles eran escasas, son todos factores que influyen a la hora de considerar la real dimensión del problema y su prevención", analizó la doctora Isabel Cassetti, directora Médica de Helios Salud Dr. Stamboulian, centro médico especializado en VIH-Sida y Hepatitis.
La información a través de material impreso, talleres con pares, involucrando a los actores en las actividades de prevención, es una de las estrategias posibles, agregó la experta. Y concluyó: "Hablar del tema en forma continua en distintos ámbitos, como la familia, el grupo de amigos o la escuela es, por lo menos, una forma de poner el tema como una prioridad en la agenda a seguir en el área de prevención del VIH-Sida".
Por otra parte, mientras que en la Argentina se producen 6.500 diagnósticos por año. Pedro Cahn, titular de la Fundación Huésped, advirtió que el Ministerio de Salud congeló la compra de 26 millones de preservativos, que deben ser de distribución gratuita por ley. Según datos del Ministerio de Salud de la Nación más del 90% de las infecciones se producen por relaciones sexuales sin protección, en ese mismo sentido Cahn afirmó en un programa de televisión que: “hay una caída del uso del preservativo. Pueden influir factores emocionales, pero lo fundamental es que cuando hay carencias económicas la gente reduce gastos en lo que no son insumos fundamentales y entre un cartón de leche y el preservativo, se recorta el preservativo”.
ONU SIDA está promoviendo una campaña llamada 90/90/90 que indica que con ella, para 2030 el VHI podría estar controlado. ¿Cómo funciona? “Si logramos que el 90% de quienes viven con HIV lo sepan, que el 90% de ellos esté bajo tratamiento antirretroviral y que el 90% de los que se tratan tengan su carga viral indetectable”, explicó Cahn. Y denunció: “Argentina tiene todo para cumplir con esa meta, pero nos encontramos con inexplicables demoras por parte del Ministerio de Salud que hicieron que lleguemos a este 1 de diciembre prácticamente sin preservativos para distribuir, y con mucha dificultad para proveer algunos antivirales”. Una verdadera locura de la que la administración neoconservadora de Mauricio Macri parece no hacerse cargo.
LOS NÚMEROS:
#1 La tasa de transmisión perinatal (de la madre al hijo) en 2015 fue de 5,2%. Cuba, Tailandia, Armenia y Bielorrusia ya eliminaron este forma de contagio.
#2 Tres de cada diez diagnósticos son tardíos. Esto afecta en un 31,7% a varones y en un 22,6% a mujeres en nuestro país.
#3 El 81% de quienes están diagnosticados está en tratamiento y el 70% de ellos se atiende en el sistema de salud público.
#4 Por cada dos varones con HIV una mujer es portadora del virus.
#5 Una de cada 362 personas en Argentina tiene HIV, el 30% de ellas no lo sabe.
#6 Hasta mañana, en 70 centros de todo el país se van a realizar test de HIV gratuitos y sin prescripción médica.
#7 En Argentina existen 600 centros de testeo con asesoramiento y 26 consultorios amigables.
#8 El test es voluntario, gratuito y confidencial. La línea gratuita de consultas es: 0800-333-3444
Datos muy fuertes ¿verdad?
Para finalizar, acá les dejo una serie de videos relacionados con el vih que seguramente habrá de interesarles
Pues la verdad es que me da lo mismo "lucha" que "acción" les veo pros y contras tanto a uno como a otro.
ResponderBorrarPor lo demás me parece magistral lo que habéis publicado. Hay mucho por hacer.
Un abrazo.
Muy didadtico y provechoso !!! Me encanto este post sobre el VIH !!!!
ResponderBorrarBESITOSSS !!!